El poder de la Kindle

Es muy a menudo que voy a las librerías de cadena más populares de Guadalajara sobre todo Gonvill y Gandhi, y que salivo al ver tantos libros tan interesantes para leer. Cuando voy, a menudo no adquiero un libro para yo leerlo; los que compro son para mis hijos, y allí no busco ahorrar para nada, porque el desarrollo del hábito de la lectura temprano en la vida es altamente valorado en esta casa. Cuando se trata de mí, soy sincera, la historia es diferente.

Aprendí hace tiempo una recomendación que ha sido excelente para mantener mis finanzas sanas: me prometo a mi misma que pensaré seriamente en adquirir un libro, siempre y cuando siga pensando en él en una semana. Casi nunca sucede, y así salvo la economía.

En números totales y absolutos de mi vida siendo clienta de librerías, sí he terminado por adquirir muchos libros en los que sí pienso una semana después y reporto que, efectivamente, la mayoría de ellos siguen sin leerse.

Pienso que el 90% de los libros que compro, no tengo urgencia por leerlos y no los leo. Es una pena. Si yo ya hubiera leído todos los libros que me parecen interesantes, mi cultura sin duda sería mayor.

Pero me conozco, mosco. Contrasto esta experiencia con la experiencia de ir a la FIL de Guadalajara, cuando en más de alguna ocasión, -y por desgracia, no tantas- sentía las arcas llenas, y compré más libros de los que acostumbraba a leer en un año dado. Sin fallo, uno o dos terminaban por ser leídos, y el resto se resguardan en un lugar oscuro y frio donde terminan por acumular mucho, mucho polvo.

Aquí les viene el hack. Si tienes una Kindle, o un Nook, o incluso en la app de Kindle que se puede leer en una tablet, puedes bajar un número infinito de fragmentos gratuitos antes de leer un libro. Si lees en inglés esto es incluso, más poderoso por que la oferta de libros disponibles en Amazon es muy amplia en inglés. Sin embargo, también funciona para los libros en español (o en otro idioma) bastante bien.

Recién soy practicante de este ejercicio. Y lo he disfrutado mucho hasta ahora.

La oportunidad de leer las introducciones sin límite de tiempo, en un espacio propiamente mío, es decir, a mis anchas, es muy gratificante. Te da la oportunidad de no solo evaluar si vale la pena leer el libro antes de hacer la inversión, también te da la oportunidad de ver si solo leer el fragmento basta para sentir si algo te está quedando en relación con el tiempo invertido. Esta es la verdadera evaluación para decidir comprar un libro o no. Si yo sé que mi mundo interior se colapsará si no termino de leer un libro que me está gustando o del que estoy aprendiendo mucho, ya sé que debo comprar el libro.

Además, y muy importante….. la oportunidad de leer un fragmento en paralelo a descubrir quién es el autor es invaluable. En mi caso, considero fundamental descubrir quién es la persona detrás del renglón, porque sí me importa tratar a mis libros como personas, sobre todo en literatura y mucha no-ficción; así puedo formarme una idea (quizá pre-concebida, y disminuye el factor sorpresa), de qué voy a encontrar en las palabras. Para mí, eso no es un problema. Me gusta saber qué voy a descubrir.

Así que, si no sabes qué leer, acércate a tu Kindle, trabaja tu Kindle. Juega a bajar fragmentos, y descubre tu siguiente gran lectura, y descubre a nuevos grandes autores de nuestros días, o de antaño. Cuéntame como te va con esta forma de buscar literatura interesante, y nos leemos pronto.